sábado, 10 de enero de 2009

10 de enero de 2009

Querida famila, ¡feliz año nuevo!
Gracias por vuestras noticias, que compartimos con alegría.
Desde nuestra tierra roja, quizás por la sangre de tantos mártires e injusticas, nos sumamos a la esperanza de la humanidad que cree en un mundo nuevo, en un hombre nuevo.
Queremos gritar paz y justicia, perdón y reconciliación.
Queremos comprometernos en todo esfuerzo por una más justa distribución de los bienes de la tierra y de los bienes de nuestro país.
Reafirmamos nuestro compromiso por la constucción de un Congo de justicia y de paz, de libertad y fraternidad, de igualdad de oportunidades y de solidaridad desinteresada.
Pedimos a nuestros vecinos y a los lejanos que nos dejen crecer, que nos dejen reconstruir nuestro país, nuestras vidas, que se acerquen a los bienes de nuestro país por las vías normales y justas del comercio.
Creemos que las masacres pueden terminar, que los abusos hacia los niños y adolescentes, que son convertidos en niños soldado pueden terminar, que las familias pueden reconciliarse y la paz reestablecerse.
Para ello contamos también con vosotros:
no volváis la cara, nuestras vidas están también en vuestras manos, en vuestro modo de consumir y en vuestro modo de asociaros y de actuar para que los gobiernos de los países poderosos y también el gobierno de la RDCongo busquen nuevas estrategias para su desarrollo y bienestar y para el desarrollo y bienestar de los otros.
Feliz año nuevo...solidario.
Andrés